Tanto el aire que respiramos como las aguas de nuestros océanos se pueden contaminar si no tenemos cuidado. Y no queremos tener mares y ríos que puedan dañar nuestra salud o la de los animales que al final podemos consumir. Entonces, ¿qué podemos hacer para contribuir a que esto no ocurra? Manejar de manera adecuada los desechos, sobre todo las empresas pecuarias o de la salud, que generan gran cantidad de desechos. Quizás, haya escuchado que los entierran, y otros prefieran quemarlos. Pero, podemos preguntarnos ¿y eso no afecta al medio ambiente? Bueno, la respuesta es, sí. Cada vez que quemamos basura, o cuerpos de animales al aire libre o los enterramos, le hacemos daño a nuestro planeta. Por eso, necesitamos tomar medidas para ayudar a frenar la contaminación.

Los incineradores son una forma eficaz en la que podemos evitar que el índice de contaminación sea mayor. Debido a la tecnología que se ha implementado en los últimos años, se ha logrado que las empresas pecuarias, hospitales y clínicas pongan en práctica estos métodos con el fin de reducir la producción de estos desechos contaminantes. Tanto en Venezuela como en otros países se está optando por estos equipos, siempre teniendo en cuenta las normas medioambientales, logrando buenos resultados. Además, los incineradores tienen como finalidad el disponer de grandes cantidades de desechos médicos y pecuarios, con el fin de reducirlos en una cantidad que sea más manejable y sin contaminación. Por eso es necesario que conozcamos un poco para así contribuir a la preservación del planeta.

¿Cuál es el problema?

La problemática que persiste en el sector pecuario, es la descomposición de animales cerca de fuentes hídricas, que comprende lagunas, ríos, quebradas y fuentes subterráneas. Esta última no se puede detectar a simple vista, por eso hay que ser más cuidadosos al momento de tomar una decisión en cuanto a la disposición de desechos. Y en el sector clínico, los desechos médicos de riesgo biológico, residuos provenientes de áreas de internación de enfermos, consultas internas y primeros auxilios, residuos infecciosos de áreas de aislamiento de enfermos infectocontagiosos, laboratorios de microbiología, residuos cortopunzantes de quirófanos, animales de experimentación, salas de parto, morgues, autopsias, etc.

Estos residuos, al estar expuestos al medioambiente y al caer las lluvias producen sustratos llamados lixiviados. Estas sustancias son muy solubles en agua, y de fácil absorción para la tierra, llegando a contaminar tierras de cultivo y fuentes de agua. Estos agentes tóxicos con el tiempo son ingeridos por los animales y posteriormente los seres humanos; trayendo consigo una ola de enfermedades que puede llegar a ser mortal a gran escala para ambas especies. Con los incineradores Inyecto-flama que cuentan con tecnología CM, prevenimos que se produzcan estos contaminantes, ya que cumplen con todos los requerimientos medioambientales, por lo que podemos estar más tranquilos, al saber que podemos contribuir para tener un planeta más limpio.

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